viernes, 28 de noviembre de 2008

Espero curarme de ti

Espero curarme de ti en unos días. Debo dejar de 
fumarte, de beberte, de pensarte. Es posible. 
Siguiendo las prescripciones de la moral en turno. Me 
receto tiempo, abstinencia, soledad. 

¿Te parece bien que te quiera nada más una semana? 
No es mucho, mi es poco, es bastante. En una 
semana se pueden reunir todas las palabras de amor 
que se han pronunciado sobre la tierra y se les 
puede prender fuego. Te voy a calentar con esa 
hoguera del amor quemado. Y también el silencio. 
Porque las mejores palabras del amor están están entre dos 
gentes que no se dicen nada. 

Hay que quemar también ese otro lenguaje lateral y 
subversivo del que ama. (Tú saber cómo te digo que 
te quiero cuando digo: "qué calor hace", "dame 
agua", "¿sabes manejar?,"se hizo de noche"... Entre 
las gentes, a un lado de tus gentes y las mías, te he 
dicho "ya es tarde", y tú sabías que decía "te 
quiero".) 

Una semana más para reunir todo el amor del 
tiempo. Para dártelo. Para que hagas con él lo que tú 
quieras: guardarlo, acariciarlo, tirarlo a la basura. No 
sirve, es cierto. Sólo quiero una semana para 
entender las cosas. Porque esto es muy parecido a 
estar saliendo de un manicomio para entrar a un 
panteón.


- Jaime Sabines

1 comentario:

Verònica dijo...

Wow!! Es buenisimo, me gustò mucho, es cierto lo de las tantìsimas maneras de decir te quiero. Me resultaron imàgenes fuertes la de la hoguera y ese final entre manicomio y panteòn. El amor.. si que mata y enloquece! Besote! Vero.